Un partido político dirigido por una inteligencia artificial (IA) y cuyo líder es un chatbot. Quizá suene a ciencia ficción o al argumento de una serie distópica, pero es un hecho real; ese partido ya existe, y forma parte de la campaña electoral en Dinamarca. Se llama Synthetic Party, y está liderado por Leader Lars, un chatbot con el que cualquier ciudadano puede hablar a través de la plataforma Discord.
Su objetivo es captar a los daneses que normalmente no votan, a los antipolíticos, y al mismo tiempo, poner la tecnología en el centro del debate político y establecer los mecanismos necesarios “para que rinda cuentas”.
La aspiración de sus impulsores es promover la convivencia de la inteligencia artificial y las personas y la discusión sobre cómo pueden los gobiernos responsabilizar a la IA de sus prejuicios y otras posibles influencias sociales.
Sus impulsores buscan que se aborde la convivencia humanos-inteligencia artificial y se regulen sus responsabilidades
“Nuestro objetivo a largo plazo es inscribir la inteligencia artificial en un marco democrático y, a su vez, democratizar la tecnología”, explica Asker Bryld Staunaes, miembro del grupo de artistas Computer Lars y del centro tecnológico MindFuture y principal creador e impulsor de Synthetic Party, en una conversación online.
Pero, ¿cuál es su ideología? ¿Progresista? ¿Conservador? “El partido es sintético, lo que literalmente significa que homogeneiza lo que parece contradictorio o dispar”, responde Staunaes.
De hecho, la inteligencia artificial que lidera el partido ha desarrollado su programa basándose en las propuestas de todos los partidos políticos minoritarios daneses –aquellos que concurrieron a las elecciones pero no obtuvieron escaño- desde 1970.¿Y qué puede aportar una propuesta política tan dispar a los ciudadanos? “Puede proporcionarlos un espejo de sí mismos, cuál es el aspecto de ‘la gente’, del ‘pueblo’, en la era del big data y del aprendizaje automático”, opina el miembro de Computer Lars.
Aunque el líder del Synthetic Party sea una inteligencia artificial, evidentemente los impulsores del proyecto son personas. “Surgió como una colaboración entre el grupo de artistas Computer Lars, que desarrolla la política y la tecnología, y el centro tecnológico MindFuture, que financia el proyecto; y todos coordinamos juntos la estrategia”, explica Staunaes.
Añade que, además, como cualquier otra organización política de nueva creación, “actualmente está reclutando miembros y creando conciencia”.
Porque, explican sus impulsores, el Synthetic Party aspira a mantenerse en el tiempo y a acabar presentando una lista propia de candidatos en próximas contiendas electorales. “Ahora somos parte de la campaña electoral (los daneses celebran elecciones generales el próximo 1 de noviembre) pero no estaremos en las papeletas antes de 2023 por lo menos”, dice Satunaes.
Para ello, asegura que “estamos abiertos a otras formas de organización; por ejemplo, sería interesante ver funcionar al partido como una organización autónoma descentralizada a través del blockchain (cadena de bloques, en inglés), ya que eso podría permitir una gobernanza y una programación más colectiva que la que ofrecemos ahora desde Computer Lars, que es un grupo artístico”.